Quemador rústico de color blanco predominante con tonalidades tierra en su parte superior. Con agujeros situados de forma estratégica para que la luz de la llama permitan realizar su reflejo en su misma forma. Ideal para derretir ceras aromáticas y encontrar esos momentos para nosotrxs mismxs de desconexión. Pocas existencias. Una vez agotado no se volverá a reponer por descatalogación.
